EL DEBER DE LOS PADRES CRISTIANOS

                               EL DEBER DEL PADRE

Los padres cristianos tienen la responsabilidad de engendrar hijos y criarlas, proveyéndoles para sus necesidades físicas y materiales. Mucho más allá de esto, están en el deber de instruirlos para que experimente el nuevo nacimiento y se desarrollen en el conocimiento de Dios. Estas enseñanzas primero por el buen ejemplo de los padres y también por la palabra de Dios.

El Gobierno y la diciplina en el hogar descansa tanto sobre la esposa como en el esposo. Cuando está ausente el esposo, la esposa preside en el hogar. Pero los dos siempre deben de estar de acuerdo en la manera de diciplina y deben apoyarse el uno al otro. Deben tomar en cuenta las características distintas de los hijos, procurando ser comprensivos. La diciplina debe ser siempre firme y cumplida pero mesclado con amor

Los deberes de los padres en cuanto a su familia se encierran en cuatro palabras: engendrarla, criarla, instruirla y educarla. Tú y tu casa es el orden en las Escrituras. Estas frases contemplan a la familia como una unidad, y a un jefe del hogar quien es responsable de sus bienestar espiritual y material.

Cuando Dios estaba por destruir el mundo con el diluvio, dijo a Noe: Entra tú y tu casa em la casa. Cuando el Señor se disponía a revelar a Abraham sus secretos, dijo: Se que Abraham mandara a sus hijos y su casa después de si, que guarden el camino de Jehová. El Señor contempla al individuo con toda su casa, como vemos en los casos de Zaqueo.

Los padres cristianos tienen grandes ventajas, si sus padres saben cumplir sus deberes.

A). EL DEBER DE ENGENDRAR SUS HIJOS

1.Uno de los propósitos de la unión sexual es la procreación de los hijos (Gn.1-28).                      

 Cada matrimonio debe tener como parte del plan eterno de Dios, si a él agrade concederla descendencias.

2.Los hijos constituyen la herencia de Dios para los padres                                                                       

  Si bien es cierto que la paternidad responsable discierne sobre el número de hijos que una pareja puede criar y educar, también es una gran verdad que cada hijo implica para los padres una fuente de grandes bendiciones.

B). EL DEBER DE EDUCAR A LOS HIJOS (Col. 3-21)                                                                          

1) La instrucción requiere disciplina. La educación cristiana en el hogar consiste en dar instrucción con el fin de que los hijos ajusten su vida a la instrucción, L practica de la palabra fortalecerá la cofinancia. Los padres deben velar porque los hijos sigan la instrucción recibida. Si hubiera falta los padres deberán enderezarlos los pasos por el camino correcto.

2) La disciplina debe ser con sabiduría. No exasperéis a vuestros hijos, para para que no se desalienten. El padre no debe humillar a sus hijos delante de otros, ni ser brusco en su manera de tratarlo. El castigo se debe aplicar con entendimiento y sabiduría sin pasión. No todos los hijos son iguales y se deben tratar según sus características individuales, pero nunca con parcialidad o favoritismos.

Combinando firmeza y diciplina con bondad y amor. los padres cosecharan resultados favorables con los hijos.